GUÍA DE ROCAS DE CÁCERES

GUÍA DE FÓSILES DE CÁCERES

sábado, 10 de julho de 2010

YA ESTABAN TARDANDO...


La tarde del jueves se volvió más cargada y sofocante que de lo habitual. Cuando salí a la ventana de mi casa, vi esos cielos que desde pequeño he recordado con pena cuando estaba en Orense o en Porto: un cielo entre gris y violáceo, acompañada de la típica lluvia de cenizas que provienen de los incendios forestales. Nada más verlo, pude intuir de dónde venía esta triste lluvia. "Mucho estaban tardando ya..." me dije a mí mismo, y un año más, los pastos del cerro de Cabezarrubia -o el cerro de los Pinos, o de Aldea Moret- ardía.

Mi pena no es tanto por lo que se pierde, sino por lo que no puede llegar a ser: el cerro no tiene una gran trascendencia ecológica, pero podría ser un buen parque para la ciudad, y dar a esa parte de la ciudad una zona verde decente. Es una verdadera lástima que los continuos esfuerzos por repoblar el pequeño monte y mantener su población de piñoneros se vean ahogados cada año con estos incendios. Y es patético comprobar en el otoño o la primavera, cuando subo al monte, los árboles quemados de cada verano. Preguntando sobre por qué se quema este cerro, he escuchado de todo: los que viven del lado del monte se quejan de los animales que entran en sus casas. También que las quemas ilegales del vertedero del otro lado acaban se descontrolan y acaban por prenderlo todo. Este año, los grandes pastos lo han hecho todo más fácil. Una lástima, producto de nuestra desidia.

La altura de los pinos permite salvar sus ramas más altas -es un incendio de superficie- pero eso no evita graves daños en los árboles y que los más jóvenes no sobrevivan.

4 comentários:

  1. Qué bueno eso de recordar la misma mirada de la infancia, cómo es que algunas cosas permanencen y nuestra percepción pareciera intacta. Qué triste tu relato del monte. Acá ocurre algo similar en las Reservas Naturales, cada tanto, un incendio. Muy buena la edición de "Quizá también te interese". Soy tan seguidora del blog que recuerdo cómo disfruté las fotos de "Un jardín abandonado", ya me iré a dar una vuelta por ahí, era realmente de cuento.
    Ah!! Felicidades por ser campeones mundiales, si bien no es tu tema, no puedo menos que decirlo. Acá son muchos los que ven a Maradona como tu padre.
    Buen comienzo de semana!!!!

    ResponderEliminar
  2. Gracias Azul! Ese recuerdo del olor a quemado es de los más tristes que tengo de la infancia. Galicia se quemó muchísimo a finales del siglo pasado, y nosotros que vivíamos en una aldea, muchas veces las llamas estaban a quinientos metros de casa. Teníamos realmente miedo!!

    ResponderEliminar
  3. Mucho tardaba, si.
    Desde el piso de mis padres, año tras año, se veía perfectamente cómo se quemaba todo ese pasto, además de repoblaciones que se han intentado unas cuantas veces...
    Sólo sobreviven unos pocos pinos en el "Cerro de los pinos"... ¡Qué contrasentido!

    Desde luego que podrían hacer lo que planteas. No tiene que ser tan difícil, porque voluntad de los vecinos y de mucha gente existe. El año pasado fueron voluntarios a plantar árboles (supongo que pinos) y es una lástima que siempre se termine igual. Un buen parque sería genial.

    Un saludo.

    ResponderEliminar
  4. Lo que no entiendo es que se sigan intentando plantar piñoneros, con lo fácil que arden. Y luego, es verdad que el terreno calizo no ayuda: está lleno de grietas y socavones, pero si hay voluntad... Por otro lado, los de Aldea Moret están bastante preocupados por otras cosas, como la obra interminable que tienen en mitad del barrio...

    ResponderEliminar