GUÍA DE ROCAS DE CÁCERES

GUÍA DE FÓSILES DE CÁCERES

terça-feira, 3 de fevereiro de 2015

DE VISITA AL.. CERRO ROMANOS


 Cuarcitas mirando la Sierra de San Pedro desde el pequeño rellano de la cima, en pleno enero.
Trincheras excavadas en la guerra civil, orientadas hacia el sur, y que nunca llegarían a ser escenario de lucha. En Cáceres los sublevados -antes llamados sin ningún pudor "nacionales"- intentarían proteger la ciudad de cualquier imprevisto que pudiese provenir de ese flanco.
     Alguna vez, en los primeros tiempos de este blog, habíamos hablado del Cerro Romanos. Allí habíamos encontrado estupendas cristalizaciones de cuarzo y fosforita masiva en abundancia, en una pequeña explotación que sin duda obedecían a las labores menores que acompañaron a las minas de Aldea Moret. En realidad, el cerro era bastante más amplio del que el GP creia y no habíamos subido más que a una de sus lomas bajas. Como pasa en ocasiones, habíamos confundido el todo con una de las partes. 
    Pasó algún tiempo -años- antes de que el GP volviese por esos andurriales, sobre todo, porque cuando podía ir por allí era tiempo de cazadores y los tiros espantan a los camperos como nosotros. Pero en el verano pasado regresamos y hace pocos días lo volvimos a visitar en pleno invierno, una vez pasada la temporada de caza...
     Hay varias cosas que podemos visitar en todo el conjunto del cerro. Partiendo de Santa Lucía, ermita a la que llegamos desde Aldea Moret, la subida al cerro está facilitada una vez que atravesamos la zona de coto de caza. En las laderas orientadas al sur podremos encontrar explotaciones pequenas de fosforita, junto con cuarzo. Ascendiendo más hacia su cima, atravesaremos una gran trichera construida en la guerra civil, y orientada en dirección SE-NO. Siguiendo la propia trinchera, nos toparemos con un gran filón de cuarzo, de varios metros de grosor que se prolonga hasta el punto más alto del cerro.
     Desde el punto de vista geológico, las pequeñas escombreras donde localizar estos cuarzos y fosforitas, así como las formaciones cuarcíticas que lo acompañan hacen de este cerro una visita interesante para quien quiera hacerse una idea más amplia y completa de las mineralizaciones de fosfatos de toda la zona de Cáceres. Igualmente, ofrecen una perspectiva interesante para explicar la genésis no orgánica de estas formaciones fosfatadas del sinclinal, más vinculados con el contacto de estas unidades petrológicas -cuarcitas, pizarras y calizas- con un batolito rico en fósforo.   


 Perspectiva del cerro desde su pendiente más suave, desde la ermita de Santa Lucía, en pleno mes de julio.

Explotación pequeña de fosforita en una de las laderas del cerro. La paragénesis es fundamentalmente dahlita-cuarzo-óxidos de hierro y la roca encajante lo constituyen sobre todo cuarcitas.

La foto de la derecha corresponde a una de las múltiples drusas de cuarzo, con ese color anaranjado característico por su contacto con esos óxidos de hierro.


Dahlita palmeada con cristalización de cuarzo y óxidos en el interior. Este ejemplar apareció en la escombrera de otra explotación en otro punto del cerro.
En la cumbre del cerro destaca un gran filón de cuarzo de bastante grosor, y que constituye su punto más alto. Acompañando a ese cuarzo filonario, otras muchas vetas más pequeñas lo acompañan y atraviesan la cuarcita armoricana.
Laccaria lacata, a mediados de enero. Un pequeño hongo extremadamente abundante a finales del otoño y cuya presencia se prolonga durante los meses de invierno. Aqui era fácil verlo acompanhando a los pisolithus. Al tratarse de una zona de caza, desconocemos qué especies podemos ver durante el otoño.

Pequeña espadaña y escudo nobiliario de los Mogollón en la portada de la ermita de Santa Lucía. Esta ermita se encuentra en la ladera este del cerro, y es el mejor punto para empezar un paseo por la zona.
El GP solía ir de pequeño a la romería que se celebraba en diciembre en honor de esta santa (una historia de ceguera en mi familia hizo a mi abuela muy devota de esta fiesta). Hace pocos años hubo una polémica por los terrenos que rodeaban a la ermita, que siempre habían  estado abiertos al público y que fueron cercados... no sabemos muy bien para qué.

1 comentário: