sábado, 15 de maio de 2010

TOJOS EN LA SIERRILLA.

Como fruto de esta primavera lluviosa, florida y prolongada, la sierrilla nos regala este baño de color amarillo de la flores que en el norte conocemos como "tojos". En realidad es un nombre genérico para un grpo de especies de la familia de las leguminosas, muchas de ellas espinosas y con estas vistosas flores. Las especies del norte, por otro lado, florecen a finales del invierno.
Por desgracia, las odas y serenatas a la vida que dedica Juan por las noches, los problemas burocráticos, las clase, los exámenes y hasta la situación económica han sido una combinación agotadora que no me ha permitido ni oler la primavera en estas últimas semanas salvo en contadas ocasiones. Me sepulto en esa cotidianidad que un filósofo pedante llamó "facticidad de lo dado" y con ella se pierden estos pequeños arranques de curiosidad que permite el ocio. Ah, ya llegarán tiempos mejores, pero estas primaveras son un auténtico regalo, y si las cosas siguen así, cada vez serán más escasas.  

Un cuco en la niebla se dejó fotografiar en nuestra salida a la Sierrilla.

4 comentários:

  1. ¿Esa es la sierrilla?
    Me parece que voy a tener que abandonar mis hábitos urbanícolas y darme un paseo por allí.

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  2. Angelín! En la enumeración de obstáculos para llegar a disfrutar la primavera como quisieras, ponés en último lugar las dificultades económicas. Mal de muchos consuelo de zonzos, lo sé. Lamentablemente ese motivo es el primero que me inhibe mucho en este momento para realizar tantas cosas que me gustan, ni las enumero para no amargarme, intento poner el acento en las que sí puedo, que son muchísimas. Por ejemplo leerte y comentar tus blogs, (me gustaría también más a menudo, pero en la semana no me queda resto).
    Juanito es muy bebé y por ahora demanda mucho tiempo (nunca dejará de hacerlo, pero muta la modalidad). Ahora es una cuestión física, poco sueño, dedicación exclusiva y excluyente..., para qué escribir si las estás viviendo. Si pueden, no dejen de disfrutar, cuando te quieras dar cuenta, estará en tu casa menos tiempo del que quisieras.
    En fin..., lamento extenderme tanto, pero comprendo tanto lo que percibo, que me dan ganas de charlar...
    Arriba las primerasprimaveras con Juanín, sin duda son mejores que las anteriores.

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  3. Pues sí, Víctor, pero bastarán unos pocos días de sol para angostar todo. Así es la primavera en Cáceres, corta y fugaz...

    Un saludo!

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  4. Pues yo la he llamado siempre aulaga, aunque es verdad que también se le dice tojo, y menudas "caricias" me ha dado alguna que otra vez.

    Por cierto, me voy a dar el lujo de corregir a un profe: el campo se agosta, porque el único que lo angosta todo, especialmente nuestros salarios, es el gobierno con políticas de la oposición, jajaja.

    Un saludo Ángel, y ánimo con esas tareas.

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