APLITA
Esta es una roca filonaria que
acompaña habitualmente a las extensiones más amplias de batolitos graníticos,
adentrándose en ocasiones en otros materiales que los rodean, como la pizarra o
la cuarcita, o aflorando dentro del propio batolito. Presenta un color claro y
muestra un grano muy fino, y aunque sus componentes sean iguales a los del
granito (cuarzo y feldespatos), apenas tiene sus elementos oscuros como la
biotita o el anfíbol.
Este carácter fino y claro viene
dado por las particulares condiciones del batolito que podríamos definir como
opuestas al de las rocas pegmatíticas, con una marcada ausencia de gases ricos
en agua y la ausencia de magnesio. Esto hace que los cristales de los minerales
crezcan muy poco y que los minerales oscuros sean escasos.
En ocasiones, la aplita se hace difícil de reconocer. Puede
presentar un aspecto similar al de una arenisca (como en la fotografía de al lado), con un grano muy fino, aunque
nunca aparecerá estratificada, como sí suele hacerlo la arenisca, y siempre se presenta en filones. Igualmente
las aplitas aparecen también de forma masiva, como una pasta blanca que podría
recordar lejanamente a las cuarcitas, pero con una dureza inferior.
USOS: La aplita, cuando aparece en filones atravesando otras rocas puede
convertirse en un referente útil para buscar agua, al igual que los filones de
cuarzo. No es raro que aparezcan manantiales a relativamente poca profundidad.
Esto es patente en el filón de aplitas que aparece en la trichera de la vía del
tren Cáceres-Plasencia, a la altura de los Castellanos. La presencia del agua
ha acelerado procesos de caolinización en la roca aplítica originaria.
LUGARES DE
INTERÉS: Los filones aplíticos hacen su aparición en el batolito
de Cabeza de Araya. No son difíciles de reconocerlos, por ejemplo, en los
cortes sobre el terreno en la carretera a los Barruecos, como una línea
blanquecina atravesando el granito y que nos acompaña a lo largo del camino.
Sin embargo el más destacable y amplio es el que emerge en la trinchera del
tren en su paso por la urbanización Macondo, y que además intruye en las rocas
cuarcíticas del sinclinal. Es también posible encontrar aplitas acompañando a
rocas pegmatíticas, formando una pequeña aureola el torno al filón.
Extensión: Está exclusivamente localizada
dentro de los batolitos y en sus alrededores más inmediatos, no siendo demasiado frecuente.
Banda de aplita atravesando un granito muy rico en biotita, en la trinchera del tren próxima a la casa de Conejeros.
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