PIZARRA AMPELÍTICA
Las ampelitas son, en su sentido más estricto, pizarras negras. Su color viene dado por la presencia de carbono, proveniente de sustancias orgánicas, y de pirita. Ello las hace fácilmente reconocibles. Cualquier persona que dé una vuelta por la Ronda Norte o por el Parque del Príncipe puede encontrarlas. Su característica más llamativa parte de su color oscuro y por su carácter más quebradizo y blando que las rocas que la rodean. Es por ello que muchas veces las vemos completamente deformadas y pulverizadas, dejando oquedades entre los estratos de rocas más duras. La otra característica fundamental que previamente hemos apuntado, parte del hecho de la presencia habitual de restos fósiles, habitualmente graptolites, que aparecen como frágiles trazos blancos en forma de sierra dibujados sobre la roca (el nombre proviene de este mismo hecho). Estos graptolites han permitido a los geólogos datar perfectamente estas rocas y enmarcarlas en el Silúrico (400 millones de años).
USOS: No tenemos confirmado un uso en la zona de estas rocas, aunque en otros
lugares se ha utilizado como abono, por su alto contenido en carbono, para
viñedos. Su carácter frágil y quebradizo ha impedido su uso para la
construcción.
LUGARES DE INTERÉS: Las ampelitas pueden
reconocerse en el Parque del Príncipe en la parte más cercana a Aguas Vivas, la
Ronda Norte en el corte de la Sierrilla, y en el este de la muralla de la Parte antigua. Fuera
de Cáceres, las ampelitas están presentes en el núcleo de sinclinales paleozoicos,
como Monfragüe, Cañaveral o la sierra de San Pedro.
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