Narciso "Dutch Master" rompiendo en el Parque del Príncipe.
Pues sí, si habíamos dicho que las cigüeñas están entre nosotros desde diciembre, las primeras golondrinas se dejan ver ya. Hace un par de semanas había atisbado ya en Elvas aviones reconstruyendo los nidos del año anterior, y las golondrinas han sido las siguientes, cantando bien alto desde los cables de la luz que atraviesan la Ronda Norte. No era lo único que anuncia la llegada de la primavera. Casi veinte grados a las doce del mediodía revoluciona toda la naturaleza dormida durante el invierno. También ha roto el primer narciso en el parque del Príncipe, y mis pobres jacintos están ya a la vista en las macetas de mi terraza. Y es que basta un buen día para que todo se ponga en movimiento una vez más.
La primera golondrina de la temporada amenizaba la mañana de domingo en la Sierrilla.
Una tarde en la fiesta de las Candelas, el pasado lunes: una pequeña celebración vecinal que se mantiene en los fríos tiempos de la globalización. Quizás no sean tan gélidos e impersonales como los pintan, y hay cosas que nunca cambian. Al menos eso asegura mi primo Carlos el antropólogo: lleva once años tras estas fiestas, y se mantienen igual. Tan solo cambian las cámaras de vídeo.
Y sí, estas son las que se ven por San Blas y las Candelas... y durante el resto del año también. Cigüeñas en las espadañas de San Francisco. Quizás mi lugar favorito de todo Cáceres para verlas, tal vez por esa mezcla peculiar de arte y naturaleza.
Campos floridos en olivares de la Sierrilla.
Con el sol, otra especie sale a las terrazas de los bares con prontitud...
Y con la ley antitabaco, algunos incluso más rápido.
Las nevadas cumbres de Gredos -a más de 120 km. de distancia- nos avisan que el invierno no se ha ido del todo. Tan solo nos ha concedido un respiro.
Ya se respira la primavera...
ResponderEliminarBuen recorrido, Angel
Un saludo.
Pues sí, pero espero que solo sea un tiempo. Tengo ganas que vuelva la lluvia al menos por unos días...
ResponderEliminarOtro saludo!