Detalle de estos Erodium. |
Cualquiera diría que estos pastizales floridos están separados de la ciudad
meramente por la línea del tren...
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Estos Erodium, sobre la superficie plana del canchal comparten el escaso
suelo del lehm con los narcisos bulbocodium
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Los diminutos geranios, coronando las lomas de Conejeros.
Aquí nos damos cuenta del entorno propio de
esta florecilla. Las zonas de vaguadas no son tan prolijas en esta flor.
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Aparte de estas flores, nuestro breve paseo tuvo otras recompensas: especialmente una culebrilla ciega (Blanus cinereus) al levantar una piedra (la primera que reconoce el GP como tal, antes pensaba que eran lombrices). Cuando nos atrevimos a cogerla con la mano ya era tarde y se escabullía hacia su morada subterránea, así que el GP se tiene que contentar con alguna foto parcial. A pesar de su aspecto, no hay que confundirlas con las culebras o víboras. De hecho no pertenece al orden de los ofidios, sino al de saurios y está por lo tanto más cerca de los luciones y eslizones.