Corros de bruja bien formados bajo una alcornoque. Finales de diciembre. |
Plateras, con sombrero en embudo y ligeramente enrollado en los bordes. |
Vamos a hablar básicamente de la platera (Clitocybe geotropa), una seta con la que el GP se ha topado más veces, pero que no siempre ha sido capaz de reconocer, por su parecido relativo con lactarios, muy frecuentes por todas partes.
Tamaño de las plateras, comparado con un balón. |
Níscalos a unos pocos metros, bajo pino carrasco. Como muchos lactarios liberan leche bajo su sombrero, algo que no hace la platera. |
2. Forman corros de bruja. Frente a otros muchos lactarios, que crecen de forma más diseminada, este es un buen distintivo para reconocer las plateras cuando tenemos la suerte de verlas en gran número. Las plateras forman buenos corros de bruja bajo encinas y alcornoques, y también en prados, y se ven a distancia por su tamaño.
En el ejemplar más pequeño puede observarse cómo el margen está totalmente enrollado, para después abrirse y sus láminas son decurrentes. |
3. No produce leche bajo sus láminas y sus láminas son decurrentes. Lo primero nos sirve para distinguir frente a muchos lactarios (que dejan caer látex, "leche" o "sangre" bajo sus láminas) y lo segundo (las láminas que están unidas directamente al pie) para diferenciarlo frente a determinados tricolomas y melanoleucas de tamaño similar y que aparecen también en invierno.
Otra especie parecida y que se presenta también en diciembre: Clytocibe gibba, Más pequeño y marrón que la platera. Encontrada en "el valle" de Sierra de Fuentes el mismo día. |
Un tricoloma junto a una calvatia algo rara. Las láminas del tricoloma no son decurrentes y se pueden separar del pie. También aparecieron en el valle de Sierra de Fuentes. |
Después de ver semejante corro en nuestro campo, daban ganas de llevarlas al cesto de setas. Pero el GP, siempre prudente e ignorante, prefiere llevar las que conoce sin posibilidad de duda alguna (y eso reduce las setas que recolecta el GP únicamente a los níscalos y las oronjas). Ciertamente las plateras no se confunden con ninguna seta de real peligro, pero una cosa es reconocerlas y otra muy distinta comerlas.
El GP acabó de barro y de hielo hasta las orejas. (¿Cómo es posible que esto en septiembre fuera una estepa?) |
Frutos del majuelo, muy presentes en el camino de Cáceres a Sierra de Fuentes, y ya próximos al valle. |
Vista invernal del valle, ya muy próximo a los Hornos. |
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