sábado, 23 de janeiro de 2010

VALDEFLOREZ... EN INVIERNO.


La apretada agenda dejaba un espacio el viernes por la tarde para pequeñas andanzas en bici, y desgraciadamente, la lista de lugares que visitar era demasiado larga. El G.P. se decidió por Valdeflores, aún sabiendo que era algo tarde para ir en inverno. Como suele ocurrir en estos casos, sucedió lo peor: se hizo de noche buscando pedruscos, se me estropeó el pedal y tuve que regresar a la ciudad... a pata.

Uno no puede dejar de visitar este lugar sin buscar suerte en algún pedrusco en la esperanza de encontrar una turquesa vistosa o un cristal de casiterita. El poco rato de luz que tuve me permitió encontrar algún que otro ejemplar curioso. En esta foto, ambligonita-turquesa recién fracturada. Característico en la ambligonita su vistoso color blanco, que la hace inconfundible en esta zona.

Las jaras se preparan para la explosión blanca que acontecerá en un par de meses. Muy presente en toda la sierra de la Mosca, la jara si cabe es aquí todavía más abundante debido a la erosión que supuso en el terreno la explotación de la mina hasta los años setenta, y por los incendios que han ocurrido en la sierra. Esto hizo que fuera la primera especie repobladora del terreno.

El invierno repuebla todas las viejas tapias y muros de piedra con musgos, líquenes y especies de pequeño tamaño, acostumbrados a estos hábitats.

2 comentários:

  1. ¿Sabías que el nombre auténtico del sitio es "Valdeazores"?. El nombre de Valdeflores es una corrupción de Valdeazores.
    Hay suficientes documentos que lo acreditan.
    Abrazos.

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  2. Qué curioso... Desconocía tal origen. Sí estoy interesado (y me gustaría investigarlo si tuviera... tiempo) en el papel de la minería en la historia local de Cáceres, especialmente el campo de las minas de fosfatos de Aldea Moret.

    gracias por esta pequeña información!

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