¡Ñam ñam, qué buenas están las hormigas! Jammy...
La protagonista del día es esta lagartija colilarga (psammodromus algirus), la más frecuente de nuestros alrededores, que ha querido posar alegremente para nuestras cámaras. Aquí la encontramos comiéndose tranquilamente una pobre hormiga, aunque en su dieta caben todo tipo de pequeños insectos, como casi todas las de su género.
Esta lagartija es muy fácil de ver en los días cálidos de verano, y prácticamente presente en cualquier lugar soleado al que vayamos en el campo, con matorrales o grietas en las que guarecerse rápidamente. No ha habido un solo día en el que el G.P. haya salido con la bicicleta y no se haya tropezado con alguna de ellas: este ejemplar en concreto lo hemos hallado cerca del Portanchito, en las escombreras de las canteras de cuarcita.
Aunque para el G.P. resulta muy difícil distinguir unas especies de otras, la lagartija colilarga se caracteriza sobre todo por tener presentes en todo el dorso unas escamas puntiagudas y anquiladas (esta es una característica más fácil de observar en las fotografías que al natural, cuando la lagartija va de un sitio para otro).
Esta lagartija es muy fácil de ver en los días cálidos de verano, y prácticamente presente en cualquier lugar soleado al que vayamos en el campo, con matorrales o grietas en las que guarecerse rápidamente. No ha habido un solo día en el que el G.P. haya salido con la bicicleta y no se haya tropezado con alguna de ellas: este ejemplar en concreto lo hemos hallado cerca del Portanchito, en las escombreras de las canteras de cuarcita.
Aunque para el G.P. resulta muy difícil distinguir unas especies de otras, la lagartija colilarga se caracteriza sobre todo por tener presentes en todo el dorso unas escamas puntiagudas y anquiladas (esta es una característica más fácil de observar en las fotografías que al natural, cuando la lagartija va de un sitio para otro).
Sem comentários:
Enviar um comentário